Cabezas parlantes, aerotaxis y mascotas vigiladas

Ya sea soñar con un amigo artificial disponible las 24 horas, levantar el vuelo en los atascos o librarse de los pájaros muertos que ha dejado su gato como «regalo», a los inventores participantes en la feria tecnológica CES no les falta imaginación.

He aquí lo más destacado del Consumer Electronics Show (CES), el mayor escaparate mundial de electrónica de consumo, que se celebró en Las Vegas, Nevada hasta el viernes12:

-Criatura para acompañar. “Estoy diseñado para ser una presencia de apoyo y sin prejuicios en tu vida», aseguró Wehead, una especie de criatura informática formada por un conjunto de pantallas montadas sobre una cabeza robótica, que proyecta un rostro humano y utiliza inteligencia artificial (IA). La empresa emergente estadounidense del mismo nombre ha desarrollado este extraño objeto que puede colocarse en el escritorio o una pequeña escultura y entablar una charla similar a la humana. 

«A veces solo necesitas a alguien con quien hablar y crear tus propias soluciones», afirmó el fundador de Wehead, Ilya Sedoshkin. Los entusiastas pueden adoptar una cabeza parlante mediante suscripción, por 200 dólares al mes.

-Puerta para mascotas. Poco dispuesto a encontrarse con coyotes, serpientes venenosas o mapaches en su sala de estar, Martin Diamond inventó Pawport, una puerta herméticamente cerrada que se abre con una placa que lleva la mascota. Pawport puede instalarse en una escotilla ya existente, está disponible en varios tamaños y acabados, y puede alimentarse con una batería recargable, un panel solar o conectarse a la red eléctrica. Disponible a partir de mayo, costará un mínimo de 459 dólares.

Los gemelos suizos Oliver y Denis Widler se centraron en otras sorpresas desagradables: los «regalos» -pájaros y roedores en general- que algunos gatos llevan con orgullo a sus dueños.

Con su puerta de acceso Flappie, que costará unos 350 dólares, cámaras con IA vigilan y bloquean el acceso si la boca del felino no está vacía.

La compuerta solo se abre, además, a los que tienen un microchip