Cómo cocinar el huevo cocido perfecto, según la ciencia
Los científicos dicen que han descifrado el código para hervir el huevo perfecto .
Es una receta que puedes probar tú mismo, aunque el momento no es ideal debido al aumento vertiginoso de los precios de los huevos en Estados Unidos debido a un brote de gripe aviar .
El huevo cocido perfecto tiene una yema aterciopelada combinada con una clara suave y sólida.
Lograr este equilibrio puede ser un desafío porque la yema se cocina a una temperatura más baja que la clara. Si se cocina un huevo a fuego fuerte, la yema puede quedar calcárea, mientras que si se cocina a fuego lento, la clara puede quedar gelatinosa y poco cocida.
Los investigadores cocinaron cientos de huevos y utilizaron las matemáticas para resolver este enigma. Una ecuación trataba de cómo se transmite el calor entre una superficie caliente y un huevo; otra captaba cómo el contenido del huevo se transforma de líquido a sólido con un estado gelatinoso intermedio.
Su receta final implica transferir huevos en una canasta vaporera cada dos minutos entre dos recipientes con agua, uno hirviendo y el otro tibio a 86 grados Fahrenheit (30 grados Celsius), durante un total de 32 minutos antes de enfriarlos bajo el agua corriente y pelarlos.
“Definitivamente se podría hacer esto en casa con media docena de huevos aproximadamente”, dijo Gregory Weiss, químico de la Universidad de California en Irvine, que no participó en la investigación.
En el método propuesto por los investigadores, denominado cocción periódica, las claras se calentaban y se enfriaban hasta que cuajan por completo, mientras que las yemas se mantenían firmes a una temperatura constante y se cocinaban hasta quedar cremosas.
“Casi se puede untar como en el pan”, afirma la autora del estudio, Emilia Di Lorenzo, de la Universidad de Nápoles Federico II.
Para confirmar que habían preparado algo nuevo, los investigadores probaron la composición química de los huevos preparados y los sirvieron a un panel de ocho catadores junto con los tradicionales huevos cocidos.
La investigación fue publicada el jueves en la revista Communications Engineering.
Esta nueva técnica podría significar más tiempo en la cocina en comparación con un huevo duro estándar, dijo la científica de alimentos Joanne Slavin de la Universidad de Minnesota. Pero la mezcla de texturas en la lengua podría valer el tiempo extra.
“Este es un proceso más lento para obtener un mejor resultado”, dijo Slavin, quien no participó en el estudio.