Amenazan a Maduro con «nuevas sanciones duras» si no acepta a venezolanos deportados
Estados Unidos amenazó este martes a Venezuela con «nuevas sanciones duras» si su presidente, Nicolás Maduro, no acepta a «sus ciudadanos repatriados» y le advirtió que no es un tema negociable.
«A menos que el régimen de Maduro acepte un flujo constante de vuelos de deportación, sin más excusas ni demoras, Estados Unidos impondrá nuevas sanciones duras y crecientes», adelantó el jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, en la red social X.
«Venezuela está obligada a aceptar a sus ciudadanos repatriados desde Estados Unidos. Este no es un tema de debate ni negociación. Tampoco merece recompensa alguna», insistió.
El gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, ha lanzado una operación con el propósito de expulsar del país a los migrantes en situación irregular, a quienes acusa de ser delincuentes por haber entrado sin visa, y exige que los países colaboren.
Dice que su prioridad son los miembros de los cárteles de la droga mexicanos, la banda venezolana Tren de Aragua y la pandilla M-13 y los declaró organizaciones «terroristas» globales.
Tras regresar a la Casa Blanca el 20 de enero, el republicano mandó a su enviado especial Richard Grenell a Caracas y a Rubio a varios países latinoamericanos para incitarlos a aceptar la repatriación de sus nacionales.
Algunos como El Salvador, cuyo presidente Nayib Bukele libra una guerra contra las pandillas, se prestaron de buena gana. El salvadoreño incluso propuso detener a migrantes expulsados en una megacárcel en su país.
Otros, como Guatemala, aceptaron un aumento del número de vuelos de repatriación, pero Washington está descontento con el venezolano Maduro, a quien no reconoce como presidente legítimo del país caribeño.
Estados Unidos lo acusa de haber incumplido el ritmo de vuelos «acordado» y en represalia revocó la licencia que permitía a la petrolera estadounidense Chevron operar en Venezuela.
El 13 de marzo, Estados Unidos anunció que Venezuela aceptó reanudar los vuelos de repatriación, pero al día siguiente el gobierno venezolano dijo que no se concretó por problemas meteorológicos.
– Tensa relación -Ambos países no mantienen relaciones diplomáticas desde el primer mandato de Trump en 2019, cuando impuso una batería de sanciones al país caribeño.
Trump, al igual que su predecesor demócrata Joe Biden, apoya al opositor venezolano exiliado Edmundo González Urrutia, quien reivindica el triunfo en los comicios de julio y asistió a su investidura el 20 de enero.
La relación se tensó aún más este fin de semana después de que el mandatario republicano invocara una ley de guerra de 1798 contra el Tren de Aragua y enviara en aviones a 238 venezolanos a El Salvador para ser encarcelados en una megacárcel.
El lunes Maduro tildó la decisión de «anacrónica».
«Estos migrantes venezolanos, que fueron secuestrados, que no se les dio derecho a la defensa, que son catalogados como asesinos, terroristas (…), que fueron metidos en un campo de concentración en El Salvador, tienen derecho a la defensa y no descansaré hasta que logremos su rescate y su regreso sanos y salvos», dijo el gobernante izquierdista.
«No son terroristas, no son delincuentes, no son asesinos, nuestros migrantes son gente de bien», manifestó.
Los venezolanos sufrieron de lleno la embestida antimigratoria de Trump, cuyo gobierno revocó la extensión de un amparo migratorio conocido como TPS, que cobijaba a más de 600.000 venezolanos.
El TPS es un programa establecido por el Congreso para ciudadanos extranjeros que no pueden regresar de manera segura a su país.
En 2023, aproximadamente 770.000 migrantes venezolanos vivían en Estados Unidos, según el Instituto de Políticas Migratorias (MPI), con sede en Washington.