Acusan a policía de terrorismo

Jossmar Castillo

Washington Hispanic

n oficial de la policía del sistema del Metro, de Washington, fue arrestado el pasado miércoles bajo cargos de brindar apoyo al grupo terrorista Estado Islámico (ISIS) y podría pasar hasta 20 años tras las rejas de ser hallado culpable.
Nicholas Young, de 36 años y con residencia en Fairfax, Virginia, se convirtió en el primer oficial de policía que el Departamento Federal de Investigaciones (FBI) captura en esta actitud. El oficial que laboraba con la agencia del Metro desde 2003, fue arrestado la mañana del pasado miércoles en su trabajo.
En los últimos meses, el hombre de 36 años se reunió en más de una veintena de ocasiones con otro que supuestamente se quería radicalizar. En los encuentros, Young entregó al hombre cerca de $245 en tarjetas de regalo, para que sirvieran para financiar las comunicaciones de reclutadores de ISIS.
Resultó que la persona con quien realmente se reunió Young era un policía encubierto.
“El jefe Pavlik y yo hemos trabajado de la mano con el FBI en el interés de la seguridad pública y ara asegurar que estos individuos sean llevado a la justicia” dijo el director ejecutivo de la Administración del Metro del Área de Washington (WMATA).
Mientras Young fue despedido de la agencia, un equipo del FBI acordonó la calle cercana a su residencia, en la Lee Highway con la Fairfax County Parkway, en donde realizaron un allanamiento.
De la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos en el Distrito Oriental de Virginia, manifestaron que Nicholas Young, no presentaba ningún riesgo para el sistema del Metro.
Documentos revelaron que el hombre estaba siendo vigilado por la agencia desde el 2009 por aparente conducta sospechosa. En 2010, Young fue entrevistado sobre su conexión con un conocido que se convirtió al Islam y que le brindó material de apoyo al grupo terrorista al-Shabab. En 2011 Young realizó un viaje a Libia y le dijo a las autoridades que luchó contra los rebeldes para derrotar al dictador Moammar Gadhafi.
Estos documentos también hablan sobre sus almuerzos con un hombre que aceptó que planeaba bombardear el Capitolio y de la cantidad de armas que Young tenía en su residencia y dan muestra del comportamiento paranoico que lo llevaba a pensar que tenía que armarse y ayudar a armar a los demás por si algo pasaba.