Pelosi promete “tender la mano” a ambos lados de la Cámara

AP
Washinton Hispanic

Nancy Pelosi está a horas de recuperar el mando de la Cámara de Representantes cuando se reúna el nuevo Congreso y el Partido Demócrata tome el control de la cámara baja.

Se espera que la legisladora por el estado de California, de 78 años, salga elegida presidenta de la cámara el jueves por la tarde.

En declaraciones preparadas para su discurso de toma de posesión, Pelosi hace un guiño a la nueva etapa de gobierno dividido con el compromiso de “tender la mano a los dos lados de la cámara y a las divisiones en esta gran nación”.

La congresista señala que la tribuna de la Cámara debe ser la «asamblea ciudadana de Estados Unidos” y un lugar donde la gente verá debate y donde sus voces se escuchen y afectarán a las decisiones de los legisladores, apuntó.

La legisladora californiana es la única mujer que ha ostentado la presidencia de la cámara y se unirá al selecto grupo de funcionarios que repitieron en el cargo.

“Ninguno de nosotros es indispensable”, dijo Pelosi a The Associated Press durante su campaña hace unos meses, “pero sé que soy muy buena en lo que hago”.

Según Pelosi, entre las prioridades demócratas está la rebaja del costo de la atención médica, la inversión en infraestructuras verdes y “restaurar la integridad” del gobierno.

“Demos defender a la clase media y todos aquellos que aspiran llegar a ella, porque la clase media es la columna vertebral de la democracia”, dijo.

Pelosi sigue siendo una figura muy polarizadora, denigrada por republicanos que la consideran una liberal de San Francisco y una caricatura del “gran gobierno”. Pero también la madre de cinco y abuela de nueve ha superado obstáculos laborales para convertirse en una de las políticas más poderosas del siglo XXI.

El regreso de Pelosi al puesto no estaba garantizado. Un grupo de demócratas de base deseaba un nuevo liderazgo argumentando que ya era hora para que una nueva generación tomara el mando. Sin embargo, uno a uno Pelosi se deshizo de los escépticos cambiando los votos a su favor, a veces en cuestión de días.