NY: Sospechoso de explosión enfrentará cargos federales

AP
Washington Hispanic

l hombre que pretendió suicidarse mediante un explosivo en el metro de Manhattan se encontraba preso el martes, acusado de terrorismo por el estado de Nueva York, mientras los fiscales federales preparaban sus propias acusaciones por la explosión que logró su intención de provocar un baño de sangre, dijeron las autoridades.

Akayed Ullah, de 27 años, fue acusado el martes de apoyar un acto terrorista, hacer una amenaza terrorista y poseer un arma, dijo el Departamento de Policía de Nueva York. El anuncio de los cargos federales se esperaba para más tarde.

No estaba claro si el inmigrante bengalí, hospitalizado con quemaduras en las manos y el estómago, se encontraba en estado de comparecer en una corte.

En Bangladesh, las autoridades antiterroristas interrogaban a la esposa y otros familiares de Ullah, dijeron las autoridades de ese país. Los parientes y la policía dijeron que Ullah viajó a Bangladesh en septiembre para ver a su esposa y conocer a su hijo recién nacido, pero regresó a Estados Unidos sin llevarlos consigo.

Horas después de la explosión en un pasaje subterráneo que conecta dos de las estaciones más concurridas del metro en Manhattan, el presidente Donald Trump utilizó el origen del agresor para reiterar su pedido de una mayor vigilancia de los extranjeros que entran al país y limitar la inmigración basada en lazos familiares.

Ullah, quien dijo que los investigadores que quería tomar represalias por los ataque estadounidenses a los extremistas del Estado Islámico, llegó en 2011 con una visa disponible a ciertos parientes de ciudadanos estadounidenses.

“El sospechoso terrorista de hoy entró a nuestro país mediante una migración de la familia extendida, lo cual es incompatible con la seguridad nacional”, dijo Trump en un comunicado en el que abogó por varios cambios al sistema de inmigración. Previamente, la vocera Sarah Huckabee Sanders dijo que las propuestas de Trump “hubieran podido prevenirlo”.

En su última visita a Bangladesh, el sospechoso permaneció casi todo el tiempo en un pequeño apartamento de Hazribagh, un barrio de Daca, dijo su tío, Abdul Ahad. Dijo que su sobrino arribó el 8 de octubre y regresó a Nueva York el 22 del mismo mes.

“Salía de su domicilio para rezar en una mezquita cercana”, dijo Ahad a The Associated Press.

Fue una escena que aterra a Nueva York desde hace años: Ullah sujetó un tosco artefacto explosivo a su cuerpo con velcro y tiras de plástico, bajó al tren subterráneo más concurrido del país y lo detonó, dijeron las autoridades.

No logró su intención: el único herido grave fue Ullah, dijeron las autoridades. Pero provocó pánico y la fuga de los pasajeros por un pasillo lleno de humo.

A pesar de sus heridas, Ullah habló con los investigadores en su cama de hospital, dijeron agentes del orden. “Divagaba como loco” sobre sus motivos, pero indicó que quería vengar lo que llamó la agresión de Estados Unidos al grupo Estado Islámico, dijo un agente.

Las fuentes hablaron con AP bajo la condición de anonimato por no estar autorizadas a hacerlo públicamente.