Hillary por la presidencia: “Es el momento de unirnos”

WASHINGTON HISPANIC
AP

n un emotivo discurso que pronunció luego de su arrolladora victoria en cuatro estados en las primarias del martes 7, la demócrata Hillary Clinton exclamó que “las barreras pueden superarse” y que “la justicia y la igualdad también pueden ganar”.

“Esta campaña quiere asegurar que no hay techo, que ninguno de nosotros tiene límites. Este es el momento de unirnos”, sentenció ante una multitud delirante de entusiasmo reunida en el Brooklyn.

Clinton se impuso en cuatro de los seis estados en juego el martes –California, New Mexico, South Dakota y New Jersey-, en los que hizo campaña con discursos en los que sustentó su apoyo a las comunidades inmigrantes, en especial la hispana, y a los más vulnerables.

Dos días después, el jueves 9, el presidente Barack Obama manifestó formalmente su respaldo a Hillary Clinton para sucederlo en la Casa Blanca e hizo un llamado a los demócratas para apoyarla en contra de los republicanos en las elecciones del martes 8 de noviembre.

“Miren, se lo difícil que puede llegar a ser este puesto. Por eso es que sé que Hillary es la mejor en esto”, declaró Obama en un video web que difundió la campaña de Clinton. “No creo que haya alguien más calificada para ocupar este puesto”, añadió.

El anuncio del mandatario se conoció momentos después de su conversación con Bernie Sanders, rival de Clinton en la contienda demócrata. Tras reunirse con Obama, el senador declaró que trabajará con Clinton para frenar a Donald Trump.

“No es necesario decir que voy a dar todo en mi poder y trabajaré tan duro como pueda para asegurar que Donald Trump no sea presidente de Estados Unidos”, dijo Sanders desde la Casa Blanca, con su esposa Jane acompañándolo a un lado.

Alentada por un sólido triunfo en California, Hillary Clinton se proclamó victoriosa en las primarias del Partido Demócrata, tomando su lugar en la historia y emprendiendo la difícil tarea de unir una formación fracturada para enfrentar a Donald Trump.

Clinton se impuso en cuatro de los seis estados en juego el martes 7 de junio: California, New Mexico, South Dakota y New Jersey.

La seguidilla de victorias que tanto necesitaba Clinton le permitió celebrar a lo grande el “hito” que buscaba desde hace años: convertirse en la primera mujer que encabeza la candidatura de uno de los grandes partidos para presidir el país. En Brooklyn, ante una audiencia plagada de banderas, la ex secretaria de Estado recibió los aplausos y vítores de sus seguidores.

“Las barreras pueden superarse. La justicia y la igualdad pueden ganar”, destacó. “Esta campaña quiere asegurar que no hay techo, que ninguno de nosotros tiene límites. Este es el momento de unirnos”, exclamó.

Clinton ya tenía el número de delegados necesarios para lograr la nominación del partido antes de las primarias del martes. Sin embargo, su rival el senador Bernie Sanders tenía la esperanza de poder emplear un posible triunfo en California para convencer a los miembros del partido que le brindaran su apoyo. El senador por Vermont logró victorias en Montana y North Dakota. Pero la clara ventaja de Clinton en California dejó claro que sus esfuerzos no tendrían demasiados resultados.

Sanders prometió continuar con su campaña hasta la última cita electoral, en el Distrito de Columbia el próximo martes 14.

“La lucha continúa”, insistió. Sanders ha estado sometido a una intensa presión desde la dirección demócrata para que abandone la carrera de forma amistosa, entregue a sus votantes y se una a la tarea de derrotar a Trump.

Pese a su promesa de seguir peleando por la nominación, Sanders parece haber escuchado el mensaje del partido. En sus declaraciones, normalmente apasionadas, el socialista destacó en repetidas ocasiones “estamos juntos en esto” y alegó que uno de los principios básicos de su campaña es que “no permitamos a los republicanos de derecha que controlen nuestro gobierno”.

Sanders anunció que telefoneó a Hillary Clinton para felicitarla por sus victorias.