María trae muerte y destrucción al Caribe

Redacción
Washington Hispanic

uerto Rico, la conocida «isla del encanto», está pasando por días oscuros tras la masiva destrucción que el huracán María dejó a su paso por el Caribe, provocando la muerte de al menos 18 personas en varios territorios.

Los residentes de Puerto Rico apenas se recuperaban del susto que les dio los fuertes vientos y lluvias del huracán Irma una semana atrás, cuando se les venía encima otra calamidad.
Se desconoce la magnitud de los daños, ya que decenas de municipios permanecen aislados y sin comunicación desde que María llegó el miércoles por la mañana con vientos de 250 kilómetros por hora (155 millas por hora), los más fuertes en 80 años en Puerto Rico.

El huracán Irma, que rozó Puerto Rico el 6 de septiembre, dejó a más de un millón de personas a oscuras pero no causó víctimas ni grandes daños como en otras islas. María, en cambio, arrancó ventanas, convirtió calles en ríos y destruyó cientos de viviendas.

En San Juan, la capital, enormes eucaliptos cayeron cuadra por medio sobre una arteria principal de bares, restaurantes y cafés, algunos de los cuales sufrieron daños.

Árboles derribados y grandes inundaciones bloquearon muchas carreteras y calles, creando un laberinto que obligaba a los conductores a marchar contra el flujo. Patrullas policiales con altoparlantes advertían a la gente que respete el toque de queda de 6 de la tarde a 6 de la mañana impuesto por el gobernador para seguridad de todos.

María ha provocado al menos 18 muertes en el Caribe: 15 en Dominica, dos en el territorio francés de Guadalupe y uno en Puerto Rico, donde un hombre falleció al ser golpeado por escombros que volaban.

“Este será un evento histórico para Puerto Rico”, dijo el director de emergencias Abner Gómez.

El presidente Donald Trump declaró el estado de desastre federal en la isla y prepara una visita a las áreas afectadas. En poco menos de un mes, los estados de Texas, Florida, y ahora el territorio de Puerto Rico han sido golpeados por tormentas con gran potencial destructivo.
«Puerto Rico ha sido golpeado muy duro por un nuevo huracán mounstruoso. Tengan cuidado, nuestro corazón está con ustedes, estaremos ahí para ayudar», mencionó Trump en su cuenta de Twitter.